Precioso Tour A tu Aire de 5 Días con las Maravillas del Oeste de Islandia

El segundo día empieza poniendo rumbo a la Península de Snaefellsnes. Hoy vas a explorar las pintorescas montañas y diversos pueblos pequeños a través de los senderos y caminos rurales que allí se encuentran

Haz una parada en el área de aguas termales de Deildartunguhver, donde el agua caliente brota del suelo a 97 °C. Ubicadas en el distrito de Reykholtsdalur, al Oeste de Islandia, Deildartunguhver es el manantial de aguas termales más potente de Europa.

Las aguas termales de Deildartunguhver presumen de un flujo de 180 litros por segundo. Debido a las altas temperaturas de Deildartunguhver, se han instalado pasarelas de madera y puntos de observación para evitar que los visitantes se acerquen demasiado.

Curiosamente, la intensa energía de burbujeo generada bajo Deildartunguhver permite que el agua caliente los hogares islandeses.

Cerca de allí, encontrarás las hermosas cascadas de Barnafoss y Hraunfossar, un buen lugar para hacer un descanso y almorzar antes de alcanzar la península de Snaefellsnes.

Barnafoss es una cascada rápida situada en el Oeste de Islandia, a unos 24 km de Deildartunguhver. Al llegar a la cascada de Barnafoss, verá las rápidas aguas corriendo, retorciéndose y echando espuma por un estrecho valle.

Después de deleitarte con la cascada de Barnafoss, caminarás hacia la cascada de Hraunfossar, a unos 15 m de distancia. Hraunfossar es una serie de cascadas que brotan de los salientes de las rocas menos porosas y desembocan en el río Hvita.

Tendrás la opción de explorar la impresionante cueva de lava Vidgelmir o entrar en un túnel de cueva de hielo dentro del glaciar Langjokull si así lo deseas. Vidgelmir es el mayor tubo de lava de Islandia, con 1585 metros de longitud. Asimismo, se trata de una de las cuevas más accesibles para los principiantes.

Por su parte, el Langjokull es el segundo glaciar más grande de Islandia, con una superficie de 935 km². Encontrarás un túnel de hielo artificial que te permite ver qué hay dentro de un glaciar, aunque no sea pleno invierno.

También puedes pasar el día saliendo de la carretera y descubriendo la cultura rural islandesa. Acabarás tu día en la Península de Snaefellsnes, una ubicación privilegiada para explorarla al día siguiente.

Pasa la noche en un alojamiento de la Península de Snaefellsnes.

El tercer día, podrás disfrutar de todas las maravillas que ofrece la península de Snaefellsnes.

Visita el magnífico glaciar Snaefellsjokull, famoso por su papel en la novela de Julio Verne 'Viaje al centro de la Tierra'. Snaefellsjokull es un volcán de 7000 años de antigüedad cubierto por un glaciar situado en el extremo de la península de Snaefellsnes.

Snaefellsjokull mide 1446 metros de altura y es visible desde Reikiavik. Curiosamente, el volcán Snaefellsjokull posee un rico trasfondo histórico y folclórico. Los supersticiosos habitantes de la península de Snaefellsnes lo consideran una fuente de energía, poder y misterio.

La zona que rodea el volcán está repleta de diferentes formaciones rocosas que, según se decía, eran los hogares de la gente oculta. Otros afirman que estas rocas eran trolls petrificados por el sol.

También puedes echar un vistazo a las históricas localidades con encanto que salpican los alrededores, como Budir, Hellnar, Arnastapi y Stykkisholmur. Budir es una pequeña aldea situada en los campos de lava de Budahraun. Al recorrer la zona, observarás su rica flora, que alberga unas 130 especies de plantas.

Por su parte, Hellnar es un antiguo pueblo pesquero situado en la parte más occidental de la península. Como una de las mayores estaciones pesqueras de la zona, Hellnar cuenta con el registro marinero más antiguo de Snaefellsnes, que data de 1560.

Bajando por el lado sur de la península de Snaefellsnes se encuentra Arnarstapi, un antiguo centro pesquero que ahora sirve de parada para repostar a los visitantes que se adentran en el Parque Nacional de Snaefellsjokull. Aquí encontrarás impresionantes atractivos naturales y apasionantes casas antiguas con muchas historias que contar.

Si decides visitar Arnarstapi, tómate tu tiempo para apreciar la belleza natural que te rodea. Echa un vistazo al campo de lava de Hellnahraun, donde encontrarás una antigua ruta de caballos, una de las favoritas entre los excursionistas. 

También puedes pasarte por la localidad de Stykkisholmur, en la costa norte de la península. Sirve como centro de comercio y servicios de la zona, y alberga la Casa Noruega, el edificio de dos plantas más antiguo de Islandia.

Asimismo, esta región se caracteriza por numerosas playas, montañas y formaciones geológicas rocosas, como los acantilados de Londrangar, que podrás admirar. Tómate tu tiempo y encuentra los lugares que más te interesen.

Al final del día, pasarás otra tranquila noche en la Península de Snaefellsnes.
 

En este día, te dirigirás al sur. Puedes optar por conducir por el fiordo Hvalfjordur, que quiere decir Fiordo de las Ballenas, a solo 45 minutos de Reikiavik. El fiordo, que solía servir como puerto principal de caza de ballenas, se convirtió en la base de los ejércitos británico y estadounidense durante la Segunda Guerra Mundial.

Hvalfjordur alberga también la segunda cascada más alta de Islandia, Glymur, que se eleva hasta los 198 m de altura. En verano, vale la pena hacer una ruta de senderismo de 1 hora para llegar a ella. Curiosamente, Glymur se alimenta del río Botnsa, cuyas aguas proceden de un lago situado más arriba y de algunos de los glaciares de Islandia.

Después de conducir a lo largo de este espectacular fiordo, toma un pequeño desvío hacia el Parque Nacional Thingvellir, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Una vez allí, tienes la opción de practicar snorkel en uno de los mejores sitios de buceo del mundo, Silfra.

Silfra es una fisura repleta de agua de manantial fresca y cristalina, que hoy se considera uno de los puntos de inmersión más atractivos del mundo. El agua de Silfra viaja bajo tierra, lo que se traduce en temperaturas frías constantes.

Otra razón por la que los submarinistas adoran Silfra es la extraordinaria claridad de sus aguas. Ofrece una visibilidad que se extiende hasta más de 100 m de profundidad, lo que permite ver el fondo y las paredes del cañón con claridad. Los participantes deben sentirse cómodos en el agua y saber nadar.

Si no te apetece practicar snorkel, puedes elegir una emocionante excursión en moto de nieve, que parte desde la cascada de Gullfoss. Gullfoss es una emblemática cascada que presenta dos caídas, la primera de 11 m, mientras que la segunda mide 21 m.

Asimismo, dispondrás de tiempo para visitar el resto de las atracciones del Golden Circle, como el área geotérmica de Geysir, que alberga el géiser Strokkur, el géiser más conocido del país y que expulsa chorros de agua hirviendo al entrar en erupción cada pocos minutos.

Una vez que hayas disfrutado de tu día, vas a volver a Reikiavik para pasar la última noche de tu viaje por Islandia.