Ruta en Coche A tu Aire 5 Días en Invierno y Auroras Boreales en la Costa Sur de Islandia con Cuevas de Hielo

Llega a Islandia y disfrute de tiempo libre en Reikiavik el primer día de tu tour de invierno.

Una vez que hayas aterrizado y recogido tu equipaje en el aeropuerto, un conductor te estará esperando en la sala de llegadas. Puedes ir directamente a Reikiavik para explorar la cosmopolita capital de Islandia o visitar el mundialmente famoso spa geotérmico de Blue Lagoon.

Una experiencia a Blue Lagoon es la forma perfecta de tener un primer contacto con Islandia. Relájate en sus aguas azul lechoso y disfruta de una mascarilla facial de sílice para rejuvenecer la piel tras el vuelo.

Si lo prefieres, puede dejar la visita a Blue Lagoon para el último día de tus vacaciones de invierno en Islandia y desconectar tras unos ajetreados días de turismo y aventura. Después de reservar, habla con tu agente de viajes para organizar la entrada como mejor te convenga.

Un segundo balneario que puedes visitar hoy es Sky Lagoon, ubicado en Reikiavik. Esta escapada te brinda la máxima relajación en una cálida piscina infinita mientras disfrutas de unas impresionantes vistas del océano Atlántico Norte. Uno de sus grandes atractivos es el ritual de baño Skjol, de siete pasos, inspirado en prácticas de bienestar islandesas. Las entradas premium te ofrecen acceso a vestuarios privados.

Una vez que hayas repuesto fuerzas en las curativas aguas geotermales y cuando hayas disfrutado de las vistas de los campos de lava recubiertos de musgo, tu conductor te llevará a Reikiavik, donde harás la entrada en tu alojamiento para pasar la primera noche.

Puedes aprovechar el resto del día de hoy para explorar la capital más septentrional del mundo, con sus cafés, museos, restaurantes, galerías y teatros. Visita la iglesia de Hallgrimskirkja y sube a su torre para unas vistas panorámicas del paisaje urbano, o bien ve a ver el espectacular Auditorio Harpa, una joya de la arquitectura moderna que acoge conciertos y conferencias.

Da un paseo por el Puerto Viejo para contemplar el mar. Después, ve a cenar a uno de los mejores restaurantes de la ciudad para probar la comida tradicional islandesa. Si la noche está despejada, puedes incluso hacer una excursión gratuita para ver auroras boreales. Puedes elegir entre una excursión en autobús o en barco que te alejará de las luces de la ciudad para aumentar las posibilidades de ver la aurora boreal.

Al final de este día ajetreado, dirígete a tu hotel en el centro de la ciudad para disfrutar de una buena noche de sueño antes de iniciar la aventura que te espera el próximo día.

Pasa el tercer día de estas vacaciones en Islandia explorando una magnífica cueva de hielo dentro de un glaciar.

El día da comienzo con un desayuno en el hotel. A continuación, subirás al minibús con el resto del grupo y viajarás al pie de un glaciar. Aquí subirás a un super jeep, un emocionante vehículo de tracción en las cuatro ruedas modificado para adaptarse a las condiciones de hielo.

Disfruta de una trepidante experiencia todoterreno mientras asciendes por el glaciar hasta la cueva de hielo. Las cuevas glaciares cambian cada año conforme el hielo se derrite y se vuelve a congelar, por lo que no hay dos visitas iguales. Tu guía elegirá una cueva perfecta para garantizar un viaje seguro en un fascinante entorno helado.

El guía proporcionará crampones y casco, pero deberás llevar botas de montaña resistentes y ropa de abrigo. Es posible que también quieras llevar gafas de sol, ya que el hielo puede ser muy brillante en condiciones soleadas.

Con tu grupo, caminarás por el hielo del glaciar y te adentrarás en el alucinante entorno de una cueva de hielo. Podrás sacar magníficas fotos del hielo blanco y azul brillante y admirar sus inusuales formas. El guía también te hará fotos dentro de la cueva, así que tendrás un fantástico recuerdo que mostrar a tus amigos y familiares.

Pasarás unos 45 minutos dentro de la cueva antes de volver a bajar por el glaciar. Desde aquí, regresarás a la laguna del glaciar Jokulsarlon para apreciar las vistas a la luz del día antes de emprender el viaje de regreso a Reikiavik.

Viajar a lo largo la Costa Sur de Islandia en una noche de invierno es otra excelente oportunidad para ver auroras boreales. Tu conductor detendrá el autobús para que puedas ser testigo de las preciosas auroras boreales verdes y amarillas si aparecen sobre ti en el camino de vuelta.

Cuando llegues a Reikiavik, irás a descansar a tu alojamiento y puedes pasar la tarde-noche explorando la ciudad o disfrutando de una exquisita cena.

Pasa el último día de este tour de invierno a Islandia explorando Reikiavik o visitando Blue Lagoon antes de tomar tu vuelo.

Después de dejar tu alojamiento en Reikiavik, puedes utilizar el coche de alquiler para ir al Aeropuerto Internacional de Keflavik con tiempo suficiente para tu vuelo. Eso sí, si dispones de tiempo libre antes de que salga tu vuelo, puedes hacer turismo por la ciudad o comprar algún recuerdo para llevarte a casa.

Adéntrate en el vibrante panorama cultural y visita el fascinante Museo Nacional de Islandia, donde podrás conocer la rica historia y patrimonio de Islandia.

Si te apetece un retiro tranquilo, pasea por la exuberante colina Oskjuhlid, que alberga el fantástico Perlan, una moderna cúpula de cristal que ofrece vistas panorámicas de la ciudad.

Para relajarte un poco antes de volver a casa, puedes sumergirte en el sereno entorno de la playa geotérmica de Nautholsvik. En este paraíso de arena dorada podrás disfrutar de un cálido baño en medio del fresco aire islandés.

No olvides pasarte por Laugavegur, la principal calle comercial de la ciudad, para comprar regalos o recuerdos de última hora, como diseños y artesanía islandeses únicos.

Si no pudiste visitar Blue Lagoon el primer día, puedes conducir hasta allí de camino al aeropuerto. Descansar en sus relajantes aguas antes de volver a casa es una forma fantástica de concluir esta aventura.

Si tienes tiempo, puedes explorar más zonas de la Península de Reykjanes. En esta volcánica península se encuentra la zona geotérmica de Krysuvik, que alberga alucinantes fuentes termales y burbujeantes ollas de lodo que bien vale la pena visitar. Además, podrías aprovechar para visitar las pequeñas localidades de Grindavik y Keflavik.

Cuando llegue la hora de irte, puedes dejar el coche en el aeropuerto y prepararte para el vuelo. ¡Te deseamos un buen viaje de vuelta a casa y esperamos volver a verte pronto en Islandia!