Escapada Fin de Semana de 4 Días y Auroras Boreales en Islandia

Tus vacaciones para ver las auroras boreales comienzan al aterrizar en el Aeropuerto Internacional de Keflavik. Un cómodo autobús lanzadera te estará esperando para llevarte a un hotel en la capital, desde donde disfrutarás de este largo fin de semana en Reikiavik.

De camino hacia Reikiavik, podrías hacer una parada en la famosa Blue Lagoon, el spa geotérmico más icónico de Islandia. Este spa es conocido por sus terapias curativas, aguas de un azul intenso y una atmósfera de total serenidad.

Agregar la visita a Blue Lagoon a tu itinerario se organizará según los horarios de tus vuelos. Si hoy no dispones de tiempo suficiente para visitarla, se podrá reprogramar para otro día. Tu agente de viajes se encargará de coordinarlo.

Si llegas antes del anochecer, podrás elegir entre tres emocionantes excursiones para salir en busca del fenómeno más extraordinario del invierno: la aurora boreal.

Puedes dirigirte a las laderas heladas del Monte Hafrafell, justo a las afueras de la ciudad, y recorrer sus paisajes en una aventura en quad. Tras una hora de adrenalina, un autobús te recogerá para llevarte a las zonas más oscuras, donde tendrás mayores posibilidades de ver las luces del norte.

Si prefieres algo diferente, puedes embarcarte en un crucero que parte desde el puerto de Reikiavik, navegando por las tranquilas aguas de la Bahía de Faxafloi. Esta experiencia te brinda magníficas vistas del paisaje urbano de Reikiavik, así como de los fiordos y volcanes del oeste. Cuando cae la noche, pocos lugares son mejores para admirar la aurora como este.

Otra opción es optar por un tour más personalizado en minibús, que incluye una visita previa al Museo Aurora Reikiavik. Allí podrás aprender sobre la ciencia y el folklore que rodean a las auroras boreales, además de recibir consejos útiles para detectarlas y fotografiarlas.

Si tienes algo de tiempo libre antes de tu excursión, te recomendamos salir a conocer Reikiavik. Es una ciudad vibrante, llena de arquitectura interesante y numerosas obras de arte público, como la famosa escultura de 'El Viajero del Sol'.

Reikiavik ofrece mucho para ver y hacer si deseas aprovechar al máximo tu tiempo extra.

Esta noche descansarás en un alojamiento cómodo en Reikiavik.

Después de un inicio fantástico de tus vacaciones, el segundo día lo dedicarás a salir aún más lejos de la ciudad y explorar la famosa ruta turística del Círculo Dorado en una excursión guiada. Se trata de uno de los circuitos más icónicos del país y reúne tres lugares imprescindibles que muestran la diversidad de Islandia.

Al ir en un tour guiado, disfrutarás de una experiencia mucho más inmersiva en cada parada. Aprenderás sobre la historia y las curiosidades más interesantes de cada atractivo natural, y además podrás hacerle todas las preguntas que quieras a tu guía si algo despierta tu interés.

La primera parada del día será el Parque Nacional Thingvellir, el sitio Patrimonio de la Humanidad más famoso de Islandia. No solo es la cuna de la democracia moderna del país, sino que también presume de un paisaje formidable, repleto de ríos, bosques y campos de lava.

Aquí tendrás la opción de unirte a una excursión de snorkel en la Fisura de Silfra, donde te proporcionarán un traje seco para una experiencia guiada en sus aguas cristalinas. Para participar, es necesario estar cómodo en el agua y saber nadar.

La segunda parada del Círculo Dorado es Strokkur, un géiser que lanza columnas de agua hirviendo a alturas de hasta 20 metros. Se encuentra en el Área Geotérmica de Geysir, que alberga coloridas fuentes termales y fumarolas.

Finalmente, llegarás a una impresionante cascada de dos niveles que ruge a través de un antiguo valle: la Cascada Gullfoss. En invierno, rodeada de nieve y formaciones de hielo, despliega un espectáculo natural inolvidable.

Si lo deseas, al momento de reservar puedes añadir a tu itinerario una aventura extra: una excursión en moto de nieve en el Glaciar Langjokull, donde podrás deslizarte a toda velocidad sobre su brillante superficie helada.

Otra opción es realizar un paseo a caballo sobre uno de los famosos caballos islandeses, explorando los serenos paisajes del Sur de Islandia, tal y como lo hacían los primeros colonos.

Por la noche, si no tuviste la ocasión de ver las auroras boreales el día anterior, tendrás otra nueva oportunidad antes de regresar a tu alojamiento en Reikiavik.

En el tercer día de tu viaje de invierno, la aventura te llevará a explorar la Costa Sur de Islandia, una región repleta de algunos de los paisajes más diversos e impresionantes del país, siempre acompañados por el océano Atlántico Norte.

La Costa Sur alberga dos cascadas increíbles: Seljalandsfoss y Skogafoss. Ambas miran hacia el océano y alcanzan una altura imponente de 60 metros, aunque cada una tiene su propio carácter.

La Cascada Seljalandsfoss es estrecha y alberga una enorme caverna detrás de ella, esculpida por el océano hace siglos. Los visitantes pueden caminar tras la cortina de agua para admirarla y fotografiarla desde distintos ángulos.

Por otro lado, Skogafoss es una cascada mucho más poderosa y está rodeada de leyendas sobre tesoros ocultos. Puedes disfrutar de su caída desde el valle que se abre a sus pies o subir por el sendero que lleva a la cima del acantilado.

Para hacer tu visita aún más especial, en los días soleados es común ver hermosos arcoíris formándose sobre la cortina de agua de Skogafoss.

Detrás de esta cascada se encuentran los glaciares de Eyjafjallajokull y Myrdalsjokull, que esconden dos de los volcanes más conocidos del país. Si lo deseas, al reservar este tour, puedes añadir una excursión de senderismo en el glaciar Solheimajokull, una experiencia inolvidable que te brindará vistas inigualables.

La ruta sobre el glaciar incluye todo el equipo de seguridad necesario, y contarás con el acompañamiento de un guía experto que te asistirá durante toda la actividad.

Siguiendo la ruta por la Costa Sur, llegarás a Reynisfjara, una playa de arena negra de belleza salvaje, famosa por sus olas poderosas, imponentes pilares de roca en el mar y las vistas hacia el impresionante Arco de Dyrholaey.

Desde aquí, emprenderás el regreso hacia Reikiavik recorriendo la misma ruta de la Costa Sur. No pierdas de vista el cielo si oscurece durante el trayecto, pues podrías tener la suerte de ver las auroras boreales nuevamente. Si prefieres asegurarte una última oportunidad, también puedes añadir otra excursión para cazar auroras.

Cuando sea de noche, regresarás a tu alojamiento en Reikiavik para descansar.