Guía de Viaje a Bjarnarfjordur en Strandir

Bjarnarfjordur es un fiordo de los Fiordos del Oeste, al sur de Veidileysufjordur y al norte de Steingrimsfjordur. Bjarnarfjordur es conocido por su intacto aislamiento, sus impresionantes rutas de senderismo y las juguetonas focas que colonizan las aguas del fiordo. Los visitantes de la región también pueden aprovechar para visitar la Cabaña del Hechicero y la legendaria montaña de Lambatindur. 

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La Cabaña del Hechicero

La Cabaña del Hechicero, conocida localmente como Kotbyli kuklarans, forma parte del Museo de Hechicería y Brujería. La exposición se inauguró como segunda atracción el 23 de julio de 2005, constituyendo una atracción nueva y complementaria de la región de Bjarnarfjordur. Tres casas con tejados de turba están conectadas entre sí y muestran cómo los "brujos" y los campesinos arrendatarios vivían su mística vida cotidiana en la Islandia del siglo XVII. En el interior, hay símbolos mágicos tallados en las paredes. Pieles de cordero, mangos de guadaña y una antigua cocina hacen que sea una experiencia de lo más auténtica. 

Algunos afortunados visitantes tendrán incluso la oportunidad de conocer a Sigurdur Atlason, director general del Museo, que a menudo se disfraza de hechicero para fotografiarse con los visitantes y compartir con ellos sus conocimientos sobre la conexión de la magia con la región de los Fiordos del Oeste. La Cabaña del Hechicero se encuentra en Kluka, al norte de Holmavik y solo puede visitarse en los meses de verano.

Geografía 

Una ruta de 4 km serpentea hasta la cercana y aislada montaña de Lambatindur (854 m). Para los senderistas que disfrutan de la soledad que ofrece la naturaleza, no hay mejor opción en Islandia. Rara vez los visitantes recorren estos parajes, siendo Lambatindur una especie de tesoro escondido entre los excursionistas. No hay pueblos ni ciudades cerca, así que lo más probable es que el sendero de montaña sea todo tuyo.

Eso sí, llegar a la montaña requiere un esfuerzo especial. Los paisajes montañosos que rodean la montaña son bellos senderos en sí mismos, pero es en la cima de Lambatindur donde se revelan las verdaderas vistas: un amplio océano azul en el lado noreste, madera siberiana a la deriva amontonada a lo largo de la costa y verdes tierras bajas e interesantes formaciones rocosas rodean la base de la montaña.